Las complicaciones de la ERGE: Enfermedad de reflujo Gastro-esofágico, se presentan cuando la enfermedad no se trata a tiempo. ocurren a consecuencia del daño que hacen los ácidos en la mucosa esofágica.
El reflujo GE no tratado puede causar complicaciones como tos crónica y lesiones pre-cancerígenas
Complicaciones de la ERGE
Esofagitis erosiva – Estenosis esofágica
La esofagitis erosiva puede complicarse, al cicatrizar las lesiones, con el desarrollo de un estrechamiento de la luz del esófago (estenosis esofágica) pudiendo originar dificultad o, incluso detención, del tránsito de los alimentos sólidos (disfagia), especialmente poco masticados o muy consistentes o compactos (carne).
Tos crónica, Disfonía (ronquera), Broncoespasmo
Es una de las causas de tos crónica de difícil manejo puesto que puede presentarse como único síntoma de ERGE y muchas veces los pacientes son enérgicamente tratados con fármacos que actúan sólo en la vía respiratoria sin conseguir mejoría de los síntomas al no tratar la causa de base que es la ERGE.
Esófago de Barrett
TRATAMIENTO DE LA ERGE
Para el tratamiento de la ERGE disponemos de las siguientes opciones:
Medidas generales
Tratamiento farmacológico
Tratamiento quirúrgico
Tratamiento endoscópico.
MEDIDAS GENERALES
Los pacientes deben evitar el sobrepeso, las comidas muy copiosas, alimentos concretos que originen pirosis, el tabaco y las bebidas alcohólicas, las bebidas carbonatadas, zumos cítricos y acostarse en las 2-3 horas siguientes a las comidas.
Los pacientes con síntomas nocturnos se pueden beneficiar de dormir con la cabecera de la cama elevada.
qué_es_el_reflujo_gastroesofágico__y_como_controlarlos.pdf |
TRATAMIENTO FARMACOLÓGICO DE LA ERGE
Fármacos que actúan sobre la secreción gástrica ácida y fármacos procinéticos que mejoran la motilidad del tubo digestivo.
Los alcalinos o antiácidos (almagato, magraldato, etc.) al neutralizar rápidamente la secreción gástrica ácida son eficaces en el control puntual de la pirosis. Los antisecretores (antagonistas H2 e inhibidores de la bomba de protones) disminuyen la secreción gástrica ácida y son los fármacos más eficaces en el tratamiento de la ERGE. Los IBP (omeprazol, lansoprazol, pantoprazol, etc) son más potentes que los antagonistas H2 y son el tratamiento de elección. Los IBP, también llamados “protectores gástricos”, han demostrado su eficacia en el tratamiento de la ERGE, tanto en el control de los síntomas como en la curación de la esofagitis.
En pacientes con esofagitis moderada o grave se recomienda un tratamiento continuo o de mantenimiento con IBP para prevenir la recurrencia de la enfermedad y el desarrollo de complicaciones como estenosis pépticas o esófago de Barrett. En los casos restantes se puede recomendar un tratamiento continuo o a demanda, dependiendo de la presentación casi diaria u ocasional de los síntomas. Los IBP son muy eficaces en el control de la pirosis pero menos en el control de la regurgitación alimenticia.
Los fármacos procinéticos son potencialmente beneficiosos en el tratamiento de la ERGE por mejorar el vaciamiento gástrico y aumentar el tono muscular del esfínter esofágico inferior. No se utilizan habitualmente por tener menos eficacia que los IBP y por la posibilidad de efectos adversos. Los pacientes con síntomas de regurgitación importante o con sospecha de tener digestiones lentas podrían beneficiarse de la asociación de un procinético y un inhibidor de bomba de protones.
TRATAMIENTO INVASIVO DE LA ERGE
Tratamiento mediante gastroscopia
Los pacientes con estenosis esofágicas con síntomas (disfagia) se pueden beneficiar de la práctica de dilataciones mediante gastroscopia. Actualmente se están desarrollando técnicas endoscópicas para el tratamiento de la ERGE y del esófago de Barrett, disponibles únicamente en hospitales especializados, que en un futuro podrán adquirir mayor difusión y evitar en algunos casos la necesidad de tratamiento quirúrgico.