¿Qué es una alergia o una reacción alérgica?

La alergia en general es una respuesta exagerada (reacción de hipersensibilidad) del sistema defensivo (sistema inmunitario) del paciente que identifica como nocivas determinadas sustancias inocuas (como pueden ser los pólenes de algunas plantas o los ácaros del polvo doméstico, etc) habitualmente toleradas por la mayoría de las personas.
Esta respuesta inapropiada y equivocada, en lugar de ser beneficiosa, es claramente perjudicial para el paciente y produce una serie de alteraciones inflamatorias de la piel y mucosas, que originan los diferentes síntomas

¿Qué son las alergias respiratorias?

Las alergias respiratorias, son enfermedades muy prevalentes y que están en aumento, son en su mayoría crónicas, afectan a la calidad de vida y consumen un importante número de recursos sanitarios y gastos indirectos a los pacientes. Es por tanto, necesario avanzar en el conocimiento etiopatogénico, ya que en los casos en los que se puede establecer el alérgeno causal implicado la enfermedad es potencialmente curable.

¿Cómo y por qué se producen las alergias respiratorias?

En la inflamación crónica de la mucosa respiratoria de la rinitis y el asma participan las mismas células inflamatorias, los mismos mediadores y los mismos desencadenantes. Según estudios recientes, la rinitis es un factor que predispone al desarrollo ulterior de asma.

Algunos autores consideran la enfermedad alérgica respiratoria como un espectro continuo de manifestaciones clínicas, de modo que algunos pacientes presentan síntomas nasales exclusivamente, mientras que otros presentan síntomas nasales, pero también cierta inflamación de las vías aéreas inferiores e hiperreactividad bronquial, por lo que la manifestación clínica resultante es asma y rinitis.

La respuesta inmunoalérgica que experimenta la mucosa respiratoria es idéntica en las vías aéreas superiores e inferiores, y se aprecia inicialmente una reacción de hipersensibilidad mediada por anticuerpos de clase IgE, específica para el alérgeno que desencadena la liberación de mediadores preformados por mastocitos (las células del sistema inmunológico responsable de las alergias), lo que desencadena la cadena inflamatoria causante de la sintomatología, la cronicidad y en última instancia del “remodelado de la vía aérea”

Una de las consecuencias del remodelado es la hiperreactividad bronquial o el aumento de la sensibilidad frente a estímulos broncoconstrictores, que además de ser una de las características centrales del asma, se aprecia en un elevado número de individuos con rinitis alérgica, sobre todo si ésta es causada por alérgenos perennes.

Por otra parte, la respuesta inmunológica al alérgeno se desarrolla en la vía aérea, pero también en otros órganos como la piel o la sangre periférica, y algunos individuos con rinitis o asma muestran también hiperreactividad colinérgica en otros órganos como la piel o el intestino.

Todo ello sugiere que la rinitis y el asma son las manifestaciones respiratorias de una enfermedad sistémica caracterizada por la respuesta inmunológica anómala frente al alérgeno. Algunos especialistas opinan que estos hallazgos irán ganando terreno en los próximos años, hasta modificar la definición de asma, que se entenderá como la expresión clínica de un órgano diana implicado en una enfermedad sistémica inmunológica

Hasta un 70% de los asmáticos atendidos en las consultas de neumología tiene rinitis, generalmente estos pacientes son más jóvenes y presentan un asma más leve que los asmáticos sin rinitis.

A pesar de la necesidad de tratar de forma integral la vía respiratoria (tanto superior como inferior) y de averiguar de forma sistemática en todos los asmáticos si además presentan rinitis, existe la percepción de que en las consultas de neumología se presta poca atención a la comorbilidad con rinitis, su tratamiento y su influencia sobre el asma.